Hace unos meses me encontraba del otro lado, leyendo testimonios sin parar en la página de FUTURLIFE21. Aunque había visto a una cantante nombrar a futurlife21 en numerosas ocasiones, fue el testimonio de Cristina Bosca el que me llegó al alma. Lo puse varias veces y me emocioné al sentirme identificada y fantasear con la idea de que yo pudiera conseguirlo. Se lo puse a toda mi familia, a mis amigos… Tantos años sintiéndome mal… que casi me había dado por rendida. Me diagnosticaron una intolerancia a la lactosa severa y una colitis microscópica que había condicionado mi vida radicalmente. Estaba atada a todos esos síntomas que nunca desaparecían, vivía con el miedo a ponerme mala

en el trabajo, en una reunión familiar… Era desesperante pero lo peor es que me había acostumbrado a eso. Cuando vi a Cristina no lo dudé! Tenía que intentarlo… No había nada que perder, y si era verdad?? Aún lo dudaba.
Debo decir que pensaba, y mi entorno también, que mi alimentación era buenísima… Pero ahí vino María desde el primer día a romperme los esquemas. He aprendido tanto… ha sido tan fácil aprenderlo… Que aún no creo que lleve dos meses sintiéndome tan bien! Las molestias han desaparecido, la diarrea, el cansancio, los cambios de humor, los dolores, la sensación de hinchazón, la pesadez… Y he aprendido a comer, a comer para nutrirme, para dar a mi cuerpo todo lo que necesita, para cuidarlo y así el me cuida a mi y me está dando su mejor versión, que debo de decir que es mejor de lo que me esperaba. Esto no ha hecho más que empezar y ahora siento vértigo al pensar que termina esta andadura de la mano de FUTURLIFE21… pero me noto empoderada para poder seguir sola mi camino.
Solo puedo decir, gracias! Gracias desde lo más profundo de mi corazón, porque cuando creía que no había nada más que hacer, cuando iba a darme por vencida, llegasteis vosotras para cambiarme los esquemas.
Gracias María por tu pasión, gracias Sol por tu entrega diaria, gracias Elena por compartir tu sabiduría de una forma tan generosa y gracias Cristina porque tus palabras fueron magia.
Y a ti, que puedes estar leyendo estas líneas sintiéndote como yo me sentía hace dos meses, te digo que no lo dudes, cambia, da el paso… porque merece la pena!